Está muy claro que por mucho Facebook o Twitter que tenga tu marca o empresa, si no tiene seguidores y algún que otro «influencer» ya puedes poner que regalas tus servicios, que nadie se enterará. Estudios recientes cuantifican que solo 60 empleados comprometidos con la causa de la empresa en las redes sociales, pueden multiplicar por 1000 el efecto de un tuit o un comentario de Facebook.
El número actual de empleados que «mueven» el contenido publicado por sus empresas es todavía muy bajo, ya que solo ronda un 15%. Del mismo modo, los internautas se fían más de lo que dicen los empleados de las empresas, que los directivos, que siempre pretenderán dejar bien la empresa.
El uso de las redes sociales en las empresas por sus empleados es todavía muy bajo, ya que los directivos temen que suponga una perdida de tiempo y productividad del equipo. Aunque tal vez sea la clave de tener una imagen de marca mucho más presente en la red.